Antenas en forma de espiral, capturan las frecuencias electromagnéticas del espacio, para transmitirlas a proyectores láser que dibujan con luz ondas eléctricas mediante las vibraciones estocásticas de sus motores. Este acoplamiento de la energía magnética de un sistema a otro, que hace visible y audible lo que antes era imperceptible, es la base de la obra titulada Panacoustic Vortex.
Las instalaciones de cobre que encierra nuestro entorno, escondidas en paredes, techos y suelos, permiten la conductividad de la electricidad y a su vez, la conversión de las relaciones humanas y su actividad, en señales electrónicas. Esto hace del preciado metal un importante valor de poder, progreso tecnológico y control en la sociedad contemporánea.
Las antenas y láseres actúan como un sistema panóptico de amplificación de las emisiones electromagnéticas y del ruido presente en las redes de cobre. Junto a este sistema, Mañas & Moori han realizado una serie de fotografías analógicas en las que aplican descargas eléctricas de alto voltaje sobre fragmentos de este metal, que dejan la impronta de la energía en el papel a modo de trazos fractales.
Panacoustic Vortex es el resultado de la beca de producción DKV Seguros- Álvarez Margaride que los artistas han realizado en LABoral Centro de Arte durante dos meses.
