El 4 de Diciembre de 2013 fue el 20 aniversario de la muerte de Frank Vincent Zappa, uno de los mayores genios que nos ha dado la música. Se le recuerda principalmente por su aportación al rock'n'roll, con su banda The Mothers of Invention, y más tarde por sus giras en solitario. En los más de cien álbumes que editó (y en la docena que han ido apareciendo desde su muerte) se puede encontrar un compendio de innumerables estilos: rock, pop, blues, jazz, reggae, funk, soul, doo-woop, tango, heavy metal... Además también escribió abundantes piezas de música clásica, y experimentó con síntesis y manipulación de sonido. Su legado no es sólo musical, también dirigió videoclips y largometrajes, y tuvo incluso tiempo para gestionar su propia discográfica. Hay gran cantidad de artículos y libros en los que se estudia su legado desde muchos puntos de vista, incluyendo su propia autobiografía. Mi humilde artículo no aspira a tanto, simplemente quiero presentaros a Zappa tal y como lo fui descubriendo yo.
En primer lugar, tengo que confesar que la primera vez que le escuché, quité el tema a los 20 segundos, y era precisamente uno de sus más logrados, Peaches en Regalia. Yo tenia 13 o 14 y me quedaba embobado con Eric Clapton y Creedence, ambos grandes artistas, pero bastante más fáciles de comprender. Años más tarde lo redescubrí, afortunadamente, tras leer un artículo de la revista Guitarra Total, de mediados de los 90. Hablaban de su muerte y su legado, precisamente. Recuerdo bajarme entera su discografía, y antes de que me tachéis de pirata descarado, compré uno de sus discos: Joe's Garage.
Joe's Garage es un disco doble que desarrolla una distopía un tanto peculiar. Joe es un guitarrista de un grupo de rock que alcanza la fama, pero debido a su candidez (por definirla de alguna manera) y ciertos accidentes sexuales, acaba en la cárcel. Mientras tanto, el gobierno de EEUU decide prohibir la música porque "pervierte a la juventud". Cuando Joe sale finalmente de la cárcel, no puede tocar la guitarra, asi que toca notas imaginarias junto a su banda imaginaria... Este disco contiene algunos de los clásicos zappianos, el propio Joe's Garage, Crew Sluts, Keep it Greasy, Outside Now y el genial Watermelon in Easter Hay. Este último se lo imagina el protagonista del disco, que a mi me produce cierta envidia, me gustaría poder imaginar algo parecido alguna vez en la vida.
El broche del disco está en el pequeño libreto que contiene, en el que se "excusa" por la pobreza del argumento, diciendo que si parece tonta la idea de prohibir la música, en ese mismo momento estaba en efecto prohibida en Irán.
Algunos discos más tarde me encontré con uno que era totalmente distinto a todo lo que había escuchado de Zappa. Se trata de un disco de música para la orquesta sinfónica de Londres, con Kent Nagano en la dirección ni más ni menos. Al principio lo escuché con cautela, pensando que eran versiones orquestales de sus temas rockeros. Estaba totalmente equivocado, el disco es una maravilla y demuestra lo amplio de la paleta musical de Zappa.
Poco después llegó a mis manos uno de sus primeros álbumes, Lumpy Gravy. La historia que tiene detrás es peculiar: Frank montó un micrófono en el interior de un piano, y pidió a la gente que le hablara al piano, diciendo lo primero que se les ocurriese. De las más de 20 horas de charla que se grabaron, Zappa consiguió montar una historia muy suya sobre cerdos y ponis que viven en el interior de un piano enorme. La música, por otra parte, es uno de sus primeros intentos de evadirse del mundo del rock, y algunos de los cortes son piezas fundamentales de su obra.
Más recientemente me he fijado en el Apostrophe, uno de sus discos de mayor éxito comercial y que a la vez no renuncia a su ideal musical. Os daré un consejo: cuando tengáis 10 minutos libres, escuchad de un tirón los 4 primeros cortes del disco. En mi opinión funcionan como un único tema, casi como si fuera una suite zappiana. La cantidad de ideas, de colores y estilos que hay comprimidos en estos 10 minutos... Si alguien quiere empezar a escuchar a Zappa, esto es lo primero que debe oir.
Por último, y para no seguir hablando de cada uno de sus discos, recomiendo el Hot Rats, un disco 80% instrumental e indispensable dentro del repertorio. Aquí se mueve entre el jazz, el rock y la música clásica, y destaca el tema que abre el disco, y cierra el artículo, Peaches en Regalia. Y pensar que la primera vez que la escuché me aburrió...
Por Íñigo Martínez de Pisón.
Alumno del 1º Curso de Grado en Composición de Músicas Contemporáneas.
