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El cine que importa

febrero 22, 2022
CINE - BLOG

¿Cómo olvidar esas tardes de domingo? Tardes efímeras, bañadas por la luz de un proyector posándose sobre una pantalla; tardes de emoción y risas devenidas recuerdos y melancolía. Es difícil poner palabras que definan el amor por este arte que nos acompaña desde nuestra infancia, y que es la base de nuestros sueños y anhelos vitales. Por suerte, las imágenes se valen por sí mismas. Y cineastas como Paul Thomas Anderson, Steven Spielberg o Martin Scorsese, por citar algunos contemporáneos, le dan pleno significado.

El cine es presente. Poco importa cuándo se rodó o cuándo se estrenó una película. El cine es capaz de parar el tiempo y de situarnos en un espacio que por entonces creíamos inexistente. Es un acto mágico del que no hay escape posible. Y que solo podemos canalizar de una forma: a través de la pasión. En un diálogo de El secreto de sus ojos (Juan José Campanella, Argentina, 2009), Sandoval –el personaje encarnado por Guillermo Francella— le espeta a su colega Benjamín (Ricardo Darín) lo siguiente: «un hombre puede cambiar de todo: de cara, de casa, de familia, de novia, de religión, de Dios. Pero hay una cosa que no puede cambiar, Benjamín: no puede cambiar de pasión».

Justamente sobre la pasión por el cine versa esta columna que abre hoy la colaboración entre Escuela TAI y El antepenúltimo mohicano (EAM). Un espacio en el que tendrán cabida todas las expresiones ligadas al cine clásico y actual; a autores relevantes y jóvenes promesas; a análisis cinematográficos y a recomendaciones bibliográficas. En definitiva, el cine que importa

Dicho esto, a continuación, les sugerimos tres películas que, por diferentes razones, son de obligado visionado. Filmes que reflexionan sobre la imagen, sí, pero en algunos casos sobre la realidad y normativas coetáneas:

Licorice Pizza

Licorice Pizza (Paul Thomas Anderson, EE.UU., 2021). En cines.

¿Hay algo más bonito y cinematográfico que correr por amor? La nueva película de PTA es un prodigio con una puesta en escena portentosa. Un filme cimentado sobre pequeños gestos y miradas que recoge la esencia de Embriagado de amor (Punch-Drunk Love, EE.UU., 2002). Una propuesta más ligera, si atendemos al resto de la filmografía del realizador californiano, sin embargo igualmente profunda y, ante todo, evocadora. Alana Haim y Cooper Hoffman –hijo del gran Philip Seymour Hoffman— son todo un descubrimiento, que demuestra que el carisma siempre va por delante del físico.

Un pequeño mundo

Un pequeño mundo (Un monde, Laura Wandel, Bélgica, 2021). En cines desde el 25 de febrero.

El pasado martes, el alumnado de TAI pudo ver –y reflexionar con la directora a su término; un encuentro del que os hablaremos próximamente— sobre esta cinta que nos ubica en un universo reconocible pero que nuestra memoria parece haber arrinconado: el patio de recreo como espacio idílico pero también dotado de recovecos en los que emergen los terrores diurnos que forjan identidades y traumas. En cierta manera, la ópera prima de Laura Wandel recoge el testigo de la formidable Les démons (Philippe Lesage, Canadá, 2015) como descriptora de la infancia como un espacio de descubrimiento en cuyos intersticios puede haber monstruos.

Pearl

Pearl (Elsa Amiel, Francia, 2018). En Filmin.

Hace unas semanas, en el Festival de Sundance, se presentó la meritoria Gentle (Szelíd, László Csuja, Anna Nemes, Hungría, 2022), retrato acurado sobre el mundo de bodybuilding femenino. Una temática que abordó hace casi cuatro años, en clave de cuento posmoderno, Elsa Amiel con Pearl. Una obra que surgió como respuesta a las obsesiones de la propia directora sobre los cuerpos no-normativos; representadas en una mujer que abandonó su familia para dedicarse profesionalmente a esta disciplina, y que verá cómo su pasado brota de nuevo en la antesala de su debut en la competición. Un filme que recoge la estética neón-pop de cineastas como Nicolas Winding Refn o Gaspard Noé para adaptarla al relato identitario. El resultado es una película tan sencilla como emocionante, que subraya que algunas historias se encuentran en lugares (y temáticas) insospechados.

El antepenúltimo mohicano

Park City, Utah.

* | Artículo que pertenece a una serie de textos creados por EAM en colaboración y coordinación con Escuela Universitaria de Artes (T.A.I), institución de referencia en la formación en disciplinas artísticas en España. |

** El antepenúltimo mohicano (EAM), es una revista digital (ISSN: 2386-6373) sobre cine independiente y de autor nacida el 26 de enero de 2008. Es una cabecera especializada en ficción y no-ficción exhibidas en el circuito de festivales. Es medio colaborador de otros entes como SundanceTV España, Goethe Institut Madrid y BenQ Europe. |


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