“Si el primer día que fui a Sad Hill me dicen que voy a estar metido en este proyecto tres años, no vuelvo”. Guillermo de Oliveira explica así cómo una casualidad ha hecho realidad Desenterrando Sad Hill, su primer largometraje documental sobre la recuperación del cementerio de la películaEl bueno, el feo y el malo (Sergio Leone, 1966), localizado en Burgos. De Oliveira ha protagonizado un coloquio con alumnos TAI tras la proyección de la cinta, una actividad que forma parte de las actividades programadas por el centro como bienvenida a los Masters TAI. “El fenómeno Sad Hill fue creciendo y aquella quijotada acabó haciéndose realidad”, asegura el director.
De Oliveira es un mitómano de las localizaciones de cine. Según confiesa, le gusta visitarlas con los fotogramas en el móvil, viendo cómo el tiempo las ha cambiado, imaginando dónde estaba la cámara o los actores. Por eso, cuando supo que el cementerio de Sad Hill, creado para la película, seguía existiendo y que una asociación de Burgos quería desenterrarlo y devolverlo a la vida no se lo pensó dos veces.
“Durante meses les sigo la pista y cuando por fin anuncian que tienen los permisos para desenterrar, cojo una cámara, me compro un dron, me hago un cursito acelerado y me voy con ellos con la idea de hacer una pequeña pieza, un corto documental acompañándoles 2 ó 3 días, sobre esta idea tan poética y hermosa de devolver a la vida la localización de tu película favorita 50 años después”, explica.
Pero el fenómeno se les fue de las manos. Gracias a las redes sociales, la Asociación Cultural Sad Hill consigue voluntarios para cavar llegados de toda España, Francia, Italia… Y como quieren devolver el cementerio a su estado original inician una campaña de apadrinamiento de tumbas por la que los fans de la película de Leone dan un donativo con el que compran las maderas a cambio de poner su nombre a la tumba. Así reúne 3.600 cruces.
Al ver crecer el proyecto, Guillermo de Oliveira se plantea buscar también la opinión de voces más especializadas: profesionales, vecinos que participaran en el rodaje y otros fans de El bueno, el feo y el malo que si sus circunstancias se lo permitieran seguro irían al cementerio a colaborar. Con mucho esfuerzo y meses de dedicación consiguieron las impresiones del biógrafo de Leone, el compositor Ennio Morricone, Clint Eastwood, Álex de la Iglesia, el cineasta Joe Dante (Gremlins) o el vocalista de la banda Metallica, James Hetfield.
“Yo no me esperaba ni hacer una película. Me imponía mucho tener que manejar una narrativa en 85 minutos. Me siento cómodo con 10 minutos, es a lo que estoy acostumbrado. No me veía capaz y si no hubiera sido porque no me acabó más remedio que hacerlo, no me habría atrevido”, recuerda De Oliveira.
Por eso, aconseja a los jóvenes estudiantes de cine que no paren de grabar y que se pongan objetivos difíciles. “Tenemos todos los medios a nuestra disposición. Mérito tenía hacer cine hace 60 años cuando solo se podían hacer con películas de celuloide”, sentencia. Según explica, en este documental ha habido ocasiones en las que le ha tocado sacar adelante entrevistas solo, haciéndose cargo de grabar, poner el micro, la luz y mantener una conversación para llevarla hasta donde quería.
‘Desenterrando Sad Hill’ ha obtenido el premio a la Mejor Película en la sección Noves Visions en el Sitges Film Festival.
Fotografías: Jesús Enrique Romero | Alumno TAI.