El director de cine iraní Asghar Farhadi ha sido el protagonista del último encuentro organizado por la Academia de Cine al que han podido asistir estudiantes de la comunidad TAI. Coincidiendo con el estreno de su última película Todos lo saben, protagonizada por Penélope Cruz, Javier Bardem y Bárbara Lennie, y que inauguró la 71 edición del Festival de Cannes, Farhadi desgranó las claves de su cinematografía y habló de su incursión en el cine español. desgranará las claves de su cinematografía y su incursión en el cine español.
Dos alumnos del Área de Cine de TAI firman los siguientes artículos sobre este encuentro a continuación:
-------------------------------------------------------------------------CRÓNICA DE HANUL CHOI. Alumno de 4º del Grado de Cinematografía y Artes Audiovisuales. El encuentro con el cineasta iraní Asghar Farhadi en la Academia de Cine estuvo moderado por su presidente, Mariano Barroso. La charla comenzó con Farhadi hablando sobre su experiencia como director de su nueva película Todos lo saben, una cinta en la que se enfrentó a una dirección en español, un idioma que no habla, algo que a su juicio le trajo limitaciones, pero también algunas ventajas. Compartió con los asistentes sus métodos al dirigir a los intérpretes y puso como ejemplo el personaje de Ricardo Darín, a quien aconsejó basar su personaje en el Macbeth de William Shakespeare cuando la comunicación entre ellos se hacía más complicada.

También explicó por qué quiso hacer una película en el sur de España. Según el director, los españoles muestran mucho sus sentimientos y durante una residencia temporal en nuestro país, pudo hablar con numerosos locales y usar esas conversaciones para su película. Además, como también escribe sus guiones, habló del proceso de escritura. Para él, el guion es el proceso más extenso de una producción ya que requiere varias modificaciones y reescrituras. Para ello, usa siempre un método de preguntas y respuestas, a las que el autor va dando respuesta. En relación a esto, comentó el uso de subtexto en su guion. Su método de creación es a través de descartes en los diálogos de los personajes.
"Se consigue un resultado mejor cuando los personajes no hablan demasiado"
El moderador también pregunto sobre la evolución del cine actual, en el que plataformas como Netflix están distribuyendo películas y series directamente a los televisores de los consumidores en vez de pasar por las salas de cine. Farhadi respondió que este proceso es inevitable y que ofrece nuevas oportunidades a los cineastas. Reflejó cómo a través de estas plataformas las series han conseguido una calidad superior que las películas pero expresó disgusto sobre su ritmo frenético. No obstante, a su juicio, las películas deberían estrenarse primero en el cine.
Por último, Farhadi habló con sus asistentes de sus cineastas favoritos. Para él, los cineastas que más le inspiraron fueron los directores iraníes y los del neorrealismo italiano (Fellini, Rosselini, Visconti) porque consiguieron crear obras maestras utilizando los pocos recursos que tenían. Además el uso de residentes como actores para acercar al realismo le cautivo mucho. También alabó el trabajo de Bergman, Kurosawa y Scorsese.
Uno de los espectadores preguntó sobre la situación de la mujer en el cine iraní y el director respondió que actualmente no hay tantas directoras como directores en la industria pero detrás de las cámaras la mayoría del equipo de rodaje son mujeres. A él le parece gracioso que estas mujeres trabajadoras no aparecen luego representadas en la gran pantalla, donde se presentan siempre como amas de casa. --------------------------------------------------------------------------------
CRÓNICA DE SERGIO GARAYALDE. Alumno de 4º de Grado de Cinematografía. Asghar Farhadi es uno de los directores iraníes con mayor trayectoria internacional, destacando entre sus títulos la muy premiada Nader y Simin, una separación, que lo convirtió en miembro del selecto grupo de cineastas en recibir un Óscar. Además, su interés interdisciplinar hace que también tenga trayectoria teatral y dramatúrgica.
Todos lo saben, su nuevo film, transcurre en las calles de Madrid, y sus personajes son encarnados por algunos de los intérpretes más reconocibles del mundo iberoamericano (Penélope Cruz, Javier Bardem y Ricardo Darín); Sin embargo, su director procede, no solo de otro continente, sino de otra cultura. Hablando de España, el director expuso la apertura y cercanía que ha encontrado, destacando una fuerte conexión con el sur. “No somos tan distintos como creemos. Es más lo que nos une que lo que nos separa”, aseguró.
De hecho, en cierto momento del coloquio, el director quiso hacer saber que la imagen que desde fuera se tiene de Irán no se corresponde con la realidad de su panorama cultural o cinematográfico, y destacó la presencia de la mujer dentro de la profesión. “Irán en un país de los que más directoras tiene, aunque no lo parezca”. Es un hecho que este director procede de un entorno donde la opresión a la mujer es algo corriente, pero quiso exponer que esto es algo que hace que las cineastas se vuelquen aún más en demostrar su habilidad.
“Irán en un país de los que más directoras tiene, aunque no lo parezca”En relación al mundo actoral, Asghar también comentó las diferencias entre el actor de teatro y el de cine, exponiendo que en el teatro, actor y director comienzan la creación del personaje, hasta que llega un momento en el que el actor continúa solo desde su propio conocimiento del personaje; y como contraposición a ello expuso el cine como un proceso de creación mucho más amplio. Su preferencia por el teatro (desde el punto de vista de la creación del personaje en su trabajo con el actor) es clara, calificando la experiencia de “interpretativamente más pura”, ya que, en una representación cinematográfica, a la interpretación se le incluyen otros factores como la repetición, la continuidad, o la necesidad de obviar al equipo de cuarenta personas que está compartiendo set con el actor. A nivel temático se abordó el tema del pasado como elemento ineludible de su cinematografía. Asghar Farhadi reconoció su enorme interés por esta parcela, y compartió con los asistentes varias reflexiones. “Añoramos la infancia porque en ella el pasado no significa nada. Por eso somos libres”, recordó. Otro tema destacado de su obra que también se comentó fue “Lo que no se dice”, y cómo logra trabajar esa perspectiva; a lo cual el cineasta respondió exponiendo parte de su proceso creativo: “No encuentro la historia en base al tema. Busco la historia y después la analizo, busco su tema”, “Las historias se crean desde el corazón sin ser muy consciente de por qué creas eso. Después otros lo ven y te dan una imagen de ti mismo que desconocías”. Entre sus referentes citó al arte iraní, pero también al italiano, concretamente en la etapa neorrealista de su cine, ya que considera que esa cinematografía y la cinematografía actual de Irán comparten características como la falta de presupuesto, la participación de actores poco conocidos, o la utilización de espacios reales. En concreto mencionó a cineastas como Fellini, Ingmar Bergman, Kirosawa, o Scorsese (especialmente durante su etapa con Robert De Niro). Una pregunta que parece ineludible en estos últimos años es la revolución que estamos viviendo a nivel de producción y distribución con las nuevas plataformas de streaming tipo Netflix. La posición de este director con respecto a ellas es de nuevo de apertura y optimismo, pero también de alarma. “La accesibilidad del contenido que ofrecen este tipo de plataformas es algo contra lo que el cine más tradicional no puede luchar, y además está ocupando el lugar del método de distribución principal. El problema es que el tipo de contenido ofrecido tiene una serie de características, como su gran rapidez, que aleja al espectador del cine reflexivo, que tradicionalmente ha seguido otro ritmo. No se deja reflexionar al espectador, por tanto el espectador no está acostumbrado a ello. Cuando este espectador ve otro cine, éste le parece lento e incluso le causa rechazo”, aseguró. Sin embargo, el cineasta iraní se muestra abierto a dialogar con estas plataformas para que no traten al cine del mismo modo que a sus películas.
